En lo mas oscuro y profundo de mi lucidez mental un abismo de cordura me saca a flote.
Mi razón me libera de una cárcel auto impuesta, donde el placer me tenía presa.
Escapar no era de mi locura opción si me liberaba también de tu adictiva pasión.
Fuiste lo que no debiste ser, y ahora eres lo que jamás quise que fueras.
Un fantasma de nombre Olvido, que lleva con dolor Tristeza por apellido.
Ana E. Hinojosa
Espíritu de escritor, alma de poeta.