Sigues siendo tu
mi amigo a la distancia, quien se roba mis pensamientos.
Sigues siendo tu la sonrisa que me alegra, la llamada que tanto espero.
Sigues siendo tú quien vive en mi pensamiento, quien solo al decir hola reduce el tiempo a cero.
Y sigo siendo yo con mis locuras de siempre, con mis ideas irreverentes.
Sigo siendo yo la que se rie y se enoja derrepente, la que te espera,
la que te a esperado siempre.
Sí, seguimos siendo tú y yo, aunque no le guste a nadie, aunque no le guste a la gente.
Ana E. Hinojosa